A los 11 años empecé ayudando a mi abuelita a decorar las guagüitas de masa que ella vendía el 2 de noviembre como tradición en Calderón. Desde ese momento nació en mí el cariño a estas bellas artesanías, por lo cual, acudí a trabajar primero en la fábrica de la Sra. Marina Suárez y posteriormente en el taller de la Sra. Margarita Reza, con el pasar de los años fui a trabajar con la Sra. Marujita Gordón, quien fue la persona que me incentivó a que aprendiera a amoldar, porque me decía que, de esa forma, algún día podría ponerme un taller propio. Así fue como tomé experiencia en amoldar y decorar gran variedad de figuritas, especialmente los pesebres, los cuales eran muy cotizados en temporada navideña. Gracias a todo esto, a los 20 años pude independizarme con mi propio taller, una mesa de madera, harina de trigo, anilinas y el elemento principal, mis manos, me fueron suficientes para iniciar con este sueño. Sin embargo, el reto más fuerte fue conseguir clientes, entonces realicé un muestrario de varios modelos de figuritas que llegaron a manos de personas que compraban para llevar al extranjero, así conocí y trabajé durante varios años con el Sr. Manuel Cabrera, la Sra. Ruth Carvajal y la Sra. Carolina Jordan. En la actualidad, mantengo en mi taller la elaboración de figuritas para empresas por temporada y con entregas bajo pedido por contacto directo a través de mis redes sociales.